La urea es una de las sustancias que produce la piel de manera natural, para regular la cantidad de humedad. Son sustancias denominadas "factores naturales de hidratación" (NMFs). La urea es higroscópica, ligando el agua en la capa superior de la piel, el estrato córneo. Además, la urea es queratolítica, lo que significa que rompe las conexiones entre las células muertas de la piel, con lo que mejora  el  proceso de descamación de la piel y suaviza  su superficie. Al ser un compuesto natural de la piel, la urea es bien tolerada, incluso por parte de personas que sufren de piel extremadamente seca.

Las cerámidas son lípidos importantes en la película hidrolipídica (que protege las capas externas de la piel). Producidas de forma natural en la piel sana, refuerzan la barrera cutánea, ayudando a evitar la pérdida de humedad debida a la evaporación y manteniendo alejados los irritantes que pueden causar inflamación y picor. Cuando los niveles de cerámida de la piel disminuyen, la barrera cutánea se ve afectada. La piel puede empezar a perder agua y volverse seca e irritada.

Los NMF (Factores Hidratantes Naturales) son una variedad de compuestos solubles en agua, como aminoácidos, urea y ácido láctico, que ocurren de forma natural en el estrato córneo (capa externa de la epidermis). Aumentan la capacidad de retención de agua de la piel, manteniéndola bien hidratada.

El pantenol y el dexpantenol son dos nombres de uso habitual para designar un único ingrediente. El pantenol se convierte en ácido pantoténico (un complejo de vitamina B) en la piel y mejora la regeneración y la reparación cutáneas. Se ha demostrado que su aplicación habitual mejora de forma considerable los síntomas de irritación cutánea, como la sequedad, la aspereza, la descamación y el enrojecimiento.

Asimismo, el pantenol o dexpantenol es un hidratante eficaz. Mejora la hidratación de las capas más superficiales de la piel y ayuda a reducir la pérdida de agua transepidérmica.